La Fundación Prodis y la Universidad Autónoma de Madrid reconocen la labor de Prosegur por la inserción laboral de personas con discapacidad

Madrid, 12 de noviembre de 2013.- La Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y la Fundación Prodis han celebrado hoy un acto de reconocimiento a las empresas que están impulsando la contratación de personas con discapacidad intelectual con el que quieren también concienciar a la sociedad de la importancia que tienen este tipo de iniciativas. Prosegur ha sido una de las compañías distinguidas, y con este motivo, su presidente, Helena Revoredo, ha recogido el diploma de manos del Rector de la UAM, José María Sanz, la Decana de la mencionada Facultad, Rosalía Aranda y la Presidenta de la Fundación Prodis, Soledad Herreros de Tejada.

La Compañía, que canaliza su acción social a través de la Fundación Prosegur, desarrolla varias iniciativas orientadas al apoyo del talento diferente. Entre ellas destaca, el Plan de Integración Laboral de Personas con Discapacidad Intelectual, puesto en marcha en 2007, que permite la incorporación de empleados de este colectivo como auxiliares administrativos en diversas oficinas de Prosegur. Implantado por primera vez en España, este proyecto se está extendiendo actualmente a otras sedes de la Compañía tanto en Europa como en Latinoamérica.


El acto de reconocimiento ha contado con la intervención de seis jóvenes con discapacidad intelectual quienes han transmitido cómo se sintieron cuando les ofrecieron un puesto de trabajo. Dieron las gracias “a las empresas por haber creído en las personas con talentos diferentes” y explicaron que “el tener un trabajo les había permitido sentirse útiles, ayudar a la economía familiar y poder tener planes de futuro.” Estos jóvenes contratados han recibido una formación con título propio, de dos años de duración, dirigida por la Universidad Autónoma y la Fundación Prodis, orientada a su inclusión laboral.

Asimismo, en nombre de la Fundación Prodis, su presidenta, Soledad Herreros de Tejada, agradeció a “las empresas contratantes haber creído en los jóvenes formados en la UAM” y afirmó que “su actitud solidaria había animado a otras compañías a brindar nuevos puestos de trabajo a las siguientes promociones”.