Drones, robots o cripto, así invierte Prosegur Tech Ventures en las ‘startups’ de seguridad del futuro

El futuro de la seguridad privada pasa, en gran medida, por las aportaciones de empresas innovadoras. A través de Prosegur Tech Ventures, Prosegur identifica y contribuye a financiar a las startups que marcarán la diferencia en el sector.

Las startups surgieron en San Francisco (California) en los años 50 definidas por su gran escalabilidad y su vocación revolucionara en amplios segmentos del mercado. En la década de 1970, tuvieron su primer gran impulso con el nacimiento de Microsoft y Apple, la empresa más grande del planeta, y tras un meteórico crecimiento en la era de internet, con la llegada de Amazon, Yahoo, eBay o Facebook en los años 90 y 2000, se han convertido en un catalizador del desarrollo económico a nivel global. Tras la pandemia, las empresas tecnológicas crecieron 2,3 veces más que sus homólogas de otras índoles, según el último informe de Startup Genome.

Prosegur Tech Ventures, el vehículo de inversión en startups de la compañía constituido como un fondo de inversión, ha sido uno de los actores que han contribuido a impulsar la financiación de firmas tecnológicas en el mundo. Esta rama de Prosegur nació en 2018 para invertir en proyectos innovadores en el mundo de la seguridad, que tengan la ambición de escalar y transformar el sector y que ofrezcan sinergias a las líneas de negocios de la entidad: desde compañías fintech y cripto para Prosegur Cash, a drones o robots para Prosegur Security o startups del mundo de la ciberseguridad.

 

Inversiones con efecto transformador

Desde su fundación, Prosegur Tech Ventures ha invertido en diferentes empresas emergentes de siete países (España, Brasil, Estados Unidos, Alemania, Polonia, Reino Unido e Israel) con la que trabajan en distintas líneas. “Solo invertimos en entidades en las que el negocio tiene el compromiso de trabajar al considerar que ofrece un valor relevante. Esto puede verse como una limitación, pero a su vez es una de nuestras principales fortalezas del fondo y un gran atractivo para las startups”, explica Jaime Fernández, coordinador de Prosegur Tech Ventures.

La última inversión que han realizado ha sido en SCADAfence, una compañía de ciberseguridad ubicada en Israel que garantiza la seguridad de los activos críticos de la infraestructura de una empresa (OT, por su sigla en inglés). Otro ejemplo reciente, pero en este caso del negocio de Prosegur Security, es Talkin’ Things, una iniciativa polaca que diseña tags de RFID para la monitorización de distintos activos, como ropa o medicamentos. Prosegur Security cuenta con esta solución dentro de su línea de EAS (Electronic Article Surveillance).

Dentro de los casos de éxito, también cuentan con algunos exits, compañías que han sido adquiridas por una empresa de mayor tamaño generando un retorno a la inversión, como Hdiv (adquirida por Datadog), Walmeric (por Globant) o Concil (por PagSeguro) o Cognigo (por NetApp).

 

Un ecosistema en fase de crecimiento

En el caso de Prosegur Alarms, han invertido en la española Durcal, cuyo producto es un reloj conectado que permite a las familias cuidar de las personas mayores. Esta compañía forma parte del ecosistema de más de 23.383 startups que ya existen en España, según un estudio publicado por INFORMA en octubre. Esta cifra representa el 4 % del total de proyectos creados entre 2016 y 2021, y un crecimiento del 3% respecto a las 22.771 detectadas el año pasado.

Con estas iniciativas, Prosegur aporta el valor añadido y la experiencia de más de 40 años como uno de los líderes mundiales en la industria de la seguridad. “Invertimos a nivel global, siempre y cuando tengan la capacidad de dar soporte a Prosegur en aquellas zonas que necesite la firma. Nuestro foco está puesto en proyectos en Series A y pre-Serie A. Es decir, que ofrezcan un producto validado, capaces de trabajar con Prosegur y nuestros clientes, y que muestren un crecimiento continuo en número de usuarios y cifra de negocio”, explica Barbara Albizuri, directora de Prosegur Tech Ventures.

A pesar de la pandemia, 2020 fue un año récord para las inversiones en ciberseguridad, con más de 7.800 millones de dólares invertidos en el sector a nivel mundial. La inversión en empresas de ciberseguridad se ha multiplicado por más de nueve desde 2011. “Los resultados de Prosegur Tech Ventures están siendo muy positivos y la compañía está comprometida a seguir apostando por esta forma de innovar y diversificar. Durante este último año hemos invertido en cuatro startups y dos fondos de capital de riesgo y las perspectivas es de seguir invirtiendo en nuevas empresas que aporten valor a nuestros clientes. No obstante, el capital de riesgo es un tipo de inversión a largo plazo por lo que hay que ser paciente, buscando encontrar aquellas firmas más prometedoras y a la vez, acompañando a aquellas que forman parte de nuestra cartera”, apunta Albizuri.

“Invertimos a nivel global, siempre y cuando tengan la capacidad de dar soporte a Prosegur en aquellas zonas que necesite la firma. Nuestro foco está puesto en proyectos en Series A y pre-Serie A".

El Foro Económico Mundial estima que el 70% del nuevo valor creado a nivel mundial en los próximos diez años se basará en modelos de negocio digitales. En este ámbito, la innovación externa y la interna se han convertido en dos valores complementarios y claves en Prosegur para su transformación y la de sus clientes. Las startups en las que invierten aportan conocimiento de nuevos sectores, además de agilidad a la hora de presentar nuevos productos al mercado. “La innovación externa y la innovación interna son totalmente complementarias y ambas son necesarias para la transformación de cualquier empresa. En el caso de las tecnologías y productos que son el núcleo del negocio, es importante internalizar los desarrollos, contando con equipos de innovación interna. Por el contrario, para productos más innovadores y disruptivos, dónde vemos startups que cubren estos segmentos nicho, apostamos por la innovación externa. Tanto colaborando como invirtiendo.

En Prosegur estamos convencidos que la forma de seguir garantizando la seguridad de nuestros clientes es apostar por este modelo hibrido”, explica Fernández.

En medio de esta creciente ola de inversiones globales en tecnológicas, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, a través de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, aprobó en 2022 la Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes, más conocida como Ley de Startups. Una norma que posiciona a España a la vanguardia de Europa en el desarrollo de un ecosistema emprendedor con vocación innovadora, así como en la creación y relocalización de compañías emergentes y en la atracción de talento y capital internacional. “Esta ley va a poner a España a la vanguardia en el impulso de este ecosistema”, afirmó la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño.