Prosegur fortalece su liderazgo en el sector de la seguridad privada a través de la innovación tecnológica y la excelencia de su talento humano

Madrid, 21 de mayo de 2025.- Prosegur, referente internacional en el sector de la seguridad privada, reitera su compromiso con la innovación, la tecnología y la formación del personal cualificado en el marco del Día de la Seguridad Privada, celebrado en España cada 21 de mayo. Más allá de su valor simbólico, esta fecha sirve como punto de reflexión sobre el papel, cada vez más crucial, que desempeña este sector en el bienestar de la sociedad, la protección de infraestructuras críticas y la estabilidad de la economía nacional.

Según se recoge en un informe elaborado por DBK-INFORMA, la seguridad privada en España alcanzó en 2023 una facturación superior a los 5.970 millones de euros, con un crecimiento interanual del 5,6%. Este volumen de negocio posiciona el sector al nivel de otras industrias estratégicas del país, mientras que en su huella geográfica nacional destacan las comunidades autónomas de Madrid, Cataluña y Andalucía, al concentrar el 55% de la actividad, reflejando la correlación entre densidad poblacional, desarrollo empresarial y demanda de servicios de seguridad.

A escala global, las cifras también son elocuentes. De acuerdo con las estimaciones de Zion Market Research, la industria mundial de la seguridad privada supera ya los 260.000 millones de dólares, con previsiones de crecimiento sostenido en los próximos años, especialmente en mercados como Asia-Pacífico, Europa Occidental y Norteamérica.

Prosegur, presente en 36 países de los cinco continentes y con una plantilla de más de 175.000 empleados, apuesta por un modelo de seguridad integral denominado: Seguridad Híbrida, el cual integra la experiencia humana con la tecnología y el análisis de datos en tiempo real. Este enfoque integral permite ofrecer soluciones personalizadas y anticipar riesgos antes de que se materialicen en un entorno plagado de amenazas asimétricas y dominado por la incertidumbre internacional.

La transformación del sector está impulsada por la incorporación de tecnologías disruptivas como la inteligencia artificial, la analítica predictiva, la robótica y la automatización. Soluciones como drones para rondas perimetrales o algoritmos para la detección temprana de amenazas permiten una vigilancia más proactiva y eficaz. Sin embargo, el elemento humano sigue siendo esencial para la óptima toma de decisiones en situaciones críticas y la capacidad de respuesta ante lo imprevisto hacen del profesional de la seguridad una figura insustituible.